Unifamiliar situado en Cuarte de Huerva, Zaragoza.
Esta vivienda, de líneas puras, está revestido de travertino de importación. El acabado superficial es «en bruto». Esto quiere decir que la pieza no pasa por ningún proceso productivo más allá que el propio corte.
El proyecto se compone de un cuerpo central en forma de prisma y cubierta plana, y dos laterales de fachada piramidal.
El empleo de este travertino y este acabado otorga al conjunto una homogeneidad absoluta.
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